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| Matacanes Cuarta Parte |
Después de un merecido descanso continua la aventura, ya es medio día y estás listo para lo mejor, el paseo se extiende por agua y fuera de ella finalmente el grupo se alista para la entrada a una gran cueva y hay solo dos entradas, tú decides por donde bajar, si te gustan las cascadas puedes bajar por ahí o si te gusta sentir el descenso por cuerda, esta es la mejor, la entrada es tan angosta que realmente el solo hecho de entrar ahí es maravilloso, lleno de tensión pero a la vez cargado de mucha adrenalina, total entras y llega un momento en el que no alcanzas a tocar nada, solo estas tu descendiendo en la oscuridad, lentamente con la cuerda y lo mejor es el salto que tienes que dar adivina a donde, al agua que hay dentro de la cueva, que es aun más fría que en el exterior.
Nadas un poco y llegas a una superficie casi seca, las paredes de la cueva son húmedas, caen gotas de agua del techo, estas templando quizás, pero estas maravillado, no puedes creer lo que estás viendo, solo puedes saberlo si te aventuras y decides ir a matacanes.La luz entra cercas de la cascada, por un lado hay luz, detrás de ti oscuridad y enfrente a ti esta un lago de color turquesa, entonces sabes que no hay regreso, hay que internarse en la cueva y solo hay un modo, descender por la cueva.
Y viene otra decisión si deseas bajar con cuerda o te lanzas a la aventura, al final todos esperan abajo no sabes lo que verán tus ojos, tus emociones se dislocan...Continúa leyendo
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